¿Has notado que cuando te arreglas se sube el ánimo, te sientes más poderoso o feliz?
- María Sánchez Iglesias
- 1 day ago
- 2 min read
Updated: 8 hours ago

Pues la ciencia te respalda.
Vestirse bien no es solo cosa de apariencias. Lo que eliges ponerte cada día —sí, incluso si no sales de casa— puede tener un impacto real en cómo te sientes y cómo enfrentas el día. A este fenómeno se le conoce como “enclothed cognition” o “dopamine dressing”.
¿Qué es el “dopamine dressing”?

El término describe la idea de que tu ropa no solo comunica tu estilo, sino que también influye directamente en tu estado de ánimo. Al ponerte prendas que te gustan, con colores y texturas que te hacen sentir bien, tu cerebro libera dopamina, la hormona asociada con el placer y la motivación.
Es como servirte tu platillo favorito: no solo lo disfrutas en el momento, sino que todo tu cuerpo reacciona a esa sensación de bienestar.
Vestirse bien en casa: más que comodidad

Durante los últimos años, muchas personas se acostumbraron a trabajar o pasar más tiempo en casa… y con ello, a vivir en pijama o ropa “para estar en casa”. Pero la ciencia ha encontrado que:
Elegir ropa que te gusta eleva tu energía y tu ánimo.
Colores vivos como el amarillo, verde, rojo o azul pueden influir en tu nivel de optimismo.
Prendas asociadas a momentos felices pueden reactivar esos recuerdos positivos.
En pocas palabras: cuando te vistes bien para ti mismo, aunque nadie te vea, estás enviándole a tu mente un mensaje de “hoy me importo”.
El estilo también es autocuidado

Vestirse bien en casa no significa usar ropa incómoda, sino buscar ese punto medio entre lo cómodo y lo que te hace sentir atractivo o profesional. Puede ser tu camiseta favorita, unos jeans que te encantan o incluso una camiseta nueva de tu marca o restaurante favorito, como nuestras camisetas Arandas.
Porque al final, tu ropa no solo cubre tu cuerpo, también puede ser un recordatorio de tu identidad, tu cultura y tu alegría de vivir.
Comments